El plan de Dubai para ser
la ciudad más inteligente del mundo
La
vision de smart city del emirato incluye ser la ciudad más feliz de la tierra y
mide las emociones de residentes y turistas con 'happy meters'.
Dubai quiere ser la ciudad más inteligente del
mundo en 2017. Una pretensión ambiciosa para la que el Gobierno del emirato ha
puesto en marcha todo un plan de acción que incluye un objetivo concreto y
ampliamente repetido en los documentos relacionados con el proyecto smart city:
hacer de Dubai la ciudad más feliz de la tierra, en palabras del Primer Ministro de los Emiratos Árabes Unidos (EAU) y gobernante de Dubai, Sheikh Mohammed bin Rashid Al Maktoum, cuya visión impregna de manera significativa el proyecto de ciudad inteligente de este pequeño territorio.
La iniciativa inteligente para Dubai arrancó
oficialmente en marzo de 2014 e implica tanto al Gobierno dubaití como a otros
organismos públicos, autoridades locales, cuerpo de policía, así como espacios
de investigación y creación como las entidades que conforman el ‘Silicon
Valley’ de Dubai, con los que trabaja en cooperación público-privada.
El plan de actuación previsto, y del que ya se ha
llevado a la práctica una parte, incluye la Plataforma Dubai Inteligente como
columna vertebral del proyecto, que unifica y coordina todas las áreas sobre
las que el Gobierno quiere actuar para convertirse en smart city. La plataforma
online ha sido lanzada este mes de marzo e incluye la gestión de los servicios
ciudad inteligente, de las infraestructuras de la ciudad, alberga la plataforma
de datos abiertos y las aplicaciones enfocadas a los usuarios (residentes,
visitantes, inversores, empresarios).
Felicidad como fin último de la smart city
Desde el Gobierno dubaití aseguran que el fin
último de su visión de smart city es la felicidad, hasta tal punto que el
actual Gobierno incluye un Ministerio de la Felicidad que está dirigido por una
mujer.
Para conseguir crear felicidad, estamos utilizando la innovación tecnológica para hacer de Dubai la más eficiente, segura, transparente e impactante experiencia para los residentes y visitantes, así reza el leitmotiv de su proyecto de ciudad inteligente.
Y en ese proyecto, se incluye la utilización de
lo que denominan ‘contadores de felicidad’. Para Dubai, estos contadores
suponen una forma de capturar la emoción y opinión de forma medible. El sistema
incluye tres botones entre los que, tanto turistas como ciudadanos, han de
marcar si se sienten satisfechos, insatisfechos o sin una emoción remarcable
(neutral).
A partir de las opiniones y mediante un sistema
data centralizado, se compone un mapa de la felicidad a lo largo de la
ciudad que permite tanto a negocios, sector privado y gobierno medir las
experiencias de los usuarios y consumidores en cada lugar y organizarlos por
sectores industriales y áreas geográficas.
Para alcanzar el ansiado objetivo, el proyecto de
smart city de Dubai se fundamenta en el uso eficiente de los recursos de la
ciudad, la integración de los servicios inteligentes en la vida diaria, la
mejora en la experiencia de los turistas, residentes y empresarios en el
emirato y la garantía de seguridad y protección, tanto de ellos, como de los
datos y la información.
El objetivo marcado por sus dirigentes es que el
plan esté implementado a finales de 2017 para ser la ciudad más inteligente del
mundo. El 85% de las iniciativas y proyectos de smart city deben estar
finalizados a lo largo de 2016. Una segunda ola de iniciativas finalizaría al
año siguiente. El concepto de ciudad inteligente, desde el punto de vista
de Dubai incluido en el plan, tiene varias dimensiones:
·
Smart living o forma de vivir inteligente. En
esta dimensión se enmarcan actuaciones relacionadas con la mejora de la calidad
de vida y la atención a los ciudadanos desde el punto de vista de la cultura
dubaití y sus autoridades. En esta área de actuación se incluyen proyectos para
conectar a la red barrios, infraestructuras sanitarias, escuelas, bibliotecas y
que pueda accederse a estos servicios también desde dispositivos móviles.
· Economía inteligente. Supone el impulso de
infraestructuras de Tecnologías de la Información y la Comunicación (TIC),
empresas de investigación y ‘smart hubs’, así como el fomento de iniciativas de
turismo inteligente. El Gobierno de Dubai trata de reducir la dependencia de su
economía de la extracción y exportación de petróleo y gas y, según el
mandatario Rashid Al Maktoum, las últimas normativas aprobadas en materia de
Ciencia, Tecnología e Innovación por los EAU están enfocadas a una economía
libre de petróleo con una inversión multimillonaria en energía, transporte,
agua, tecnología, robótica, inteligencia artificial e investigación científica,
con el fin de cumplir con agenda de logros que se han marcado de aquí a 2021.
· Medioambiente. Esta dimensión no se lleva la
mayor parte de las iniciativas recogidas en la estrategia smart city de Dubai,
ocupando una posición débil si la comparamos con otras áreas de mayor
importancia como el Gobierno y la economía inteligente. Sin embargo los
objetivos que el emirato pretende cumplir en este sentido incluyen que el 25%
de la energía que se produzca en Dubai en 2030, sea energía limpia y que este
porcentaje aumente hasta el 75% para el año 2050. Actualmente ya cuentan con la
mayor planta de energía solar del mundo, con la que esperan generar 5000
megawatios para 2030.
· Movilidad inteligente. Este marco de actuación
abarca las infraestructuras de carreteras, los transportes, la gestión del
tráfico, incluyendo taxis, autobuses, metro, ‘water taxis’ y coches
compartidos, a los que se puede acceder mediante puntos inteligentes táctiles.
Ya se están implementando estaciones de carga de vehículos eléctricos y
proyectos de estacionamientos inteligentes.
· Gobierno inteligente. Es la estrategia más
desarrollada y que comenzó a fraguarse en 1999, por lo que actualmente ofrece
todo tipo de servicios a través de aplicaciones y atención a usuarios mediante
redes sociales.
En la práctica
Se han llevado a cabo o está previsto poner en
marcha más de 500 iniciativas y servicios smart según el Gobierno de Dubai. En
colaboración con los socios del proyecto, ya se han lanzado o están en fase de
lanzamiento unas 100 aplicaciones.
Destacan algunas como la denominada 'Shams
Dubai', pensada para impulsar a los consumidores de electricidad, tanto
particulares, negocios como instituciones, a generar su propia energía verde
instalando paneles solares fotovoltaicos y conectándolos a la red de
distribución de energía, de tal forma que la energía generada y no utilizada,
fluya a la red, compensando el consumo del usuario mediante un esquema de
medición inteligente.
Muy relacionado con la energía se halla el centro
de mando y control de energía que se encargará de la gestión de la corriente en
función de las necesidades. Según el Gobierno, esto hará que la red sea mucho
más fiable y reducirá al mínimo la posibilidad de apagones generalizados.
Equipado con las tecnologías de comunicaciones de redes inteligentes, las
mediciones se pueden tomar muchas veces por segundo, lo que hace que sea más
fácil detectar oscilaciones y problemas.
Por otra parte, destaca una aplicación denominada
'Smart Water Watchers App' creada para impulsar a los ciudadanos a reportar a
través del teléfono móvil situaciones de fuga o averías que supongan
desperdicio de agua en un país situado en el desierto de Arabia. El ciudadano
toma una fotografía del lugar donde está el problema, la envía a través de su
smartphone y permite localizar la zona de desperdicio de agua, ya que la
fotografía incluye las coordenadas.
Además de estas aplicaciones se han lanzado otras
relacionadas con los servicios sanitarios, con la gestión y control de las
señalizaciones de tráfico en áreas urbanas; con los servicios de emergencia y
de seguridad y con todo tipo de gestiones burocráticas que ya pueden hacerse
online.